miércoles, 26 de mayo de 2010

Perfecta imperfeccion

Realmente no estoy mal: tengo una madre que todas las mañanas me espera con el desayuno caliente, una hermana con tintes de genio incomprendida, una sobrina que ama el chocolate y para la que un perro es un “pan”. Un ahijado que temo heredará mis dudas. Una casa con paredes que guardan secretos y pasados tormentosos. Unas calles por las que he pasado muchas veces, unos árboles que me reconocen cuando paso sin decir nada. Un barrio con vecinos chismosos, hipócritas y algunos que como yo les importa poco la vida del otro. Tengo mas libros que ropa, mas escritos que vivencias, tengo mucho por lograr y de perder han dicho que es ganar un poco. Tengo amigos sinceros que conocen mis fantasmas, y algunos que solo han visto mis ojos tristes. Tengo un trabajo donde me visitan seres que se burlan de mí. Tengo un cielo limpio, unas noches tranquilas, tengo una recta bifurcada hacia el futuro. A fin e cuentas no estoy mal pues además de ello tengo un ser que borra mi tedio y espanta mis miedos, un alma compleja como una diosa griega, un átomo que había perdido, un laberinto difícil de descifrar, el motivo necesario para seguir esquivando charcos. No estoy seguro de su nombre, pero me ha dicho que le puedo llamar HADA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario